El cierre de los carriles centrales de la avenida Miguel Alemán ha provocado una carga vehicular significativa, provocando una congestión vial especialmente durante las horas pico. Los automovilistas deben cruzar un tramo de 2.6 kilómetros a una velocidad muy lenta, lo que ha generado un caos vial en la zona. Este cierre se debe a los trabajos de cimentación de la obra de la L6 del Metro, colapsando la vialidad de la zona.
Congestión de Vialidad en Miguel Alemán
Desde el pasado domingo, los carriles centrales de la avenida Miguel Alemán han sido parcialmente restringidos debido a los trabajos de la obra de la L6 del Metro. Esta medida ha tenido un impacto directo en el flujo vehicular, especialmente en las horas de mayor circulación. La congestión se ha vuelto especialmente densa a la altura del centro comercial, provocando que los automovilistas vayan a vuelta de rueda.
El tramo afectado por el cierre de carriles se extiende por 2.6 kilómetros, desde la avenida Rómulo Garza hasta la calle Apolo. Esta área se ha convertido en el punto crítico de la vialidad, donde los automovilistas deben reducir la velocidad para poder avanzar.
El cierre de los carriles centrales también ha hecho más lento el tráfico en la zona de Nueva Linda Vista, donde los conductores deben esperar varios minutos para avanzar hacia el inicio del paso a desnivel que cruza la avenida Ruíz Cortines.
A pesar de que el gobierno de Nuevo León ha informado que los trabajos son necesarios para la construcción de la L6 del Metro, la situación ha generado críticas por parte de los habitantes y conductores de la zona, quienes piden que agilicen los trabajos para evitar mayores retrasos y perjuicios a la movilidad.
Cierre de Carriles Restringe Movilidad
Los trabajos de cimentación para la línea 6 del Metro requieren el cierre de los carriles centrales de la avenida Miguel Alemán, lo que ha afectado considerablemente el flujo vehicular en la zona.
Si bien han retomado las obras depué de haber estado paradas por la precaria gestión de recursos por parte del gobierno, el colapso de la vialidad pone en evidencia la falta de previsión en el proyecto.
La congestión ha afectado a miles de conductores que atraviesan esta arteria vial a diario, aumentando el tiempo de traslado y generando estrés entre los automovilistas.
Además, el cierre de los carriles ha hecho que los autos se acumulen en la zona, creando un embotellamiento que afecta tanto a quienes se dirigen hacia Monterrey como a los que se desplazan en sentido contrario.
Los residentes de la zona han expresado su frustración por los retrasos y el malestar causado por la reducción de carriles. Muchos consideran que las autoridades debieron haber previsto mejores alternativas para minimizar el impacto en la vialidad mientras se realizan los trabajos.