Nuevo León Inicia 2025 Sin Presupuesto, Pero Samuel García Gana 19 MMDP Para Gasto Libre
Por tercer año consecutivo, Nuevo León comenzará el 2025 sin un presupuesto aprobado por el Congreso local. Sin embargo, esto no parece ser un inconveniente para el Gobernador Samuel García.
De hecho, la falta de acuerdo en la Cámara de Diputados ha abierto la puerta a la reconducción presupuestaria, una figura legal que le permitirá disponer de más de 19 mil millones de pesos para el ejercicio del próximo año.
Samuel García Sale “Ganón” con Reconducción Presupuestaria
Los 19 mil millones de pesos equivalen al 13.8% del presupuesto total, y se suma a los recursos adicionales obtenidos por el Gobierno estatal y puede ser utilizada de manera libre por el Ejecutivo.
Este escenario contrasta con la situación financiera de los municipios, quienes se verán afectados por la falta de partidas presupuestarias para el 2025 y la negativa de aprobar alzas en las participaciones federales.
A pesar de la falta de acuerdo sobre el Paquete Fiscal 2025, el Ejecutivo estatal tiene la posibilidad de reasignar los fondos excedentes a proyectos de su elección, lo que le otorga un control considerable sobre el destino de estos recursos.
A pesar de que el presupuesto total aprobado para 2023 ascendió a 140 mil 037 millones de pesos, el Estado cerrará este año con ingresos de más de 159 mil millones de pesos, dejando al menos 19 mil millones de pesos para ser utilizados a discreción del Gobernador.
Esta práctica, aunque legal, ha generado debate sobre la falta de transparencia en el uso de estos excedentes, especialmente dado que la legislación estatal no exige un informe detallado sobre su destino.
Impacto de la Reconducción del Presupuesto
La reconducción presupuestaria es un mecanismo legal que permite al Gobierno estatal manejar los recursos excedentes cuando no se aprueba un presupuesto en tiempo y forma. En este caso, la reconducción de 2024 le da al Gobernador Samuel García una importante libertad para asignar fondos, sin la necesidad de que el Congreso local apruebe un paquete fiscal.
Sin embargo, esta figura también ha sido criticada por la falta de rendición de cuentas sobre cómo se distribuyen estos recursos adicionales.
El presupuesto aprobado para 2023, que superó los 140 mil millones de pesos, se completará con los más de 19 mil millones adicionales, lo que permitirá al Gobernador seguir operando sin que haya una asignación clara para ciertos proyectos.
En términos generales, la reconducción ofrece una flexibilidad que ha sido aprovechada por el Ejecutivo para continuar con su administración, pero también plantea dudas sobre el control y la vigilancia de estos fondos, especialmente en áreas como la deuda pública y la inversión en proyectos estratégicos.
Una de las críticas más frecuentes es que, aunque la ley federal establece cómo deben usarse estos excedentes (para pagar deuda, financiar proyectos productivos o como fondo de ahorro), no obliga a realizar un informe detallado sobre su destino. Esta falta de transparencia ha generado preocupación entre especialistas en finanzas públicas, como Daniela Balbino, quien señala que el uso de estos fondos debería estar más regulado para garantizar que se empleen de manera adecuada y no se utilicen con fines políticos o personales.
Incrementan Tensiones Entre el Ejecutivo y Legislativo
El tercer año consecutivo sin un presupuesto aprobado resalta la creciente división entre el Ejecutivo y el Congreso local. A lo largo de 2024, las negociaciones entre el Gobernador Samuel García y los diputados no lograron un acuerdo sobre el paquete fiscal, lo que obligó al Estado a continuar con la figura de la reconducción.
Este bloqueo se debe principalmente a las diferencias que el mandatario sostiene contra los legisladores del bloque opositor, quienes han intentado ajustar la iniciativa de García para reasignar fondos a los municipios y otros organismos autónomos.
El 2025 será un año crucial para la administración de Samuel García, ya que al no contar con un presupuesto aprobado por el Congreso local podría limitar las posibilidades de ejecutar ciertos proyectos de infraestructura y servicios públicos.
A pesar de esta situación, el Gobernador sigue contando con recursos que le permiten tomar decisiones unilaterales sobre el destino de los fondos. Este poder discrecional, aunque legal, ha sido una fuente de controversia, ya que muchos argumentan que un presupuesto aprobado por el Congreso aseguraría mayor transparencia y responsabilidad en el manejo de los recursos.
La falta de un presupuesto aprobado también ha puesto de manifiesto la debilidad de las instituciones en Nuevo León, donde las disputas políticas entre los diferentes poderes del Estado parecen estar impidiendo una gobernanza eficiente y clara.
Nuevo León Enfrentará Retos Sin Presupuesto
El tercer año sin presupuesto aprobado por el Congreso local refleja las dificultades que enfrenta la administración de Samuel García para lograr acuerdos con el Legislativo. Aunque la reconducción le da al Ejecutivo acceso a recursos adicionales, la falta de transparencia en su uso genera dudas sobre la eficiencia y la rendición de cuentas. A medida que se acercan los meses previos al 2025, la gestión de estos fondos se convierte en un tema crucial para el futuro de la administración estatal.