Samuel García Contradice Posturas sobre Presupuesto
El gobernador de Nuevo León, Samuel García, ha generado controversia al adoptar una postura que contrasta con la que defendió en su etapa como diputado local en 2015. En aquel entonces, García respaldó firmemente la facultad del Congreso para modificar el presupuesto estatal presentado por el Ejecutivo, destacando la importancia de los contrapesos y la división de poderes. Sin embargo, ahora como gobernador, se opone a cualquier cambio en su propuesta de ingresos y rechaza aumentar recursos a los municipios, lo que ha desatado críticas y cuestionamientos sobre la coherencia de su administración.
De defensor de contrapesos a opositor de cambios
En su etapa como diputado local y coordinador de la bancada de Movimiento Ciudadano en 2015, Samuel García fue un defensor abierto de los contrapesos entre poderes. Durante el debate de una reforma constitucional que otorgaba al Congreso la capacidad de revisar y modificar el presupuesto estatal, García argumentó que esta medida era esencial para evitar la discrecionalidad del Ejecutivo y garantizar la transparencia en el manejo de los recursos públicos. “La división de poderes no debe ser un campo de confrontación, sino un espacio de equilibrio”, expresó en aquel momento.
La reforma fue aprobada por unanimidad en 2016, consolidando la facultad del Congreso para modificar el presupuesto. García, en su papel de legislador, subrayó que este cambio impedía al Ejecutivo ajustar el gasto público sin supervisión. Su postura, ampliamente respaldada por el Legislativo, fue vista como un paso importante hacia la rendición de cuentas y la consolidación de los contrapesos en la administración estatal.
Sin embargo, esa narrativa ha cambiado drásticamente desde que asumió el cargo de gobernador. En diciembre de 2023, García advirtió que no permitiría que el Congreso modificara su propuesta de ingresos para 2025 y amenazó con recurrir a la figura de la reconducción tácita, que implicaría operar bajo el presupuesto del año anterior en caso de desacuerdo entre los poderes.
Rechazo a otorgar más recursos a municipios
Otro aspecto que ha generado polémica es la negativa del gobernador a aumentar los recursos destinados a los municipios, pese a las constantes solicitudes de alcaldes que argumentan que necesitan más fondos para atender problemas locales como seguridad, infraestructura y servicios básicos. Esta postura contrasta con la de 2015, cuando García criticó las reducciones presupuestales y defendió una mayor equidad en la distribución de los recursos públicos.
En 2023, García reiteró su posición al declarar que no cedería ante las demandas del Congreso local ni de los municipios. Esta decisión ha sido ampliamente criticada por representantes municipales, quienes acusan al gobernador de centralizar los recursos y desatender las necesidades de las comunidades.
La negativa a aumentar los presupuestos municipales ha sido percibida como una contradicción respecto a su discurso pasado, cuando promovía un enfoque más participativo y descentralizado. En palabras de un alcalde afectado: “Lo que pedimos no es un favor, es justicia presupuestal”.
La evolución de Samuel García, de diputado defensor de la autonomía legislativa a gobernador que rechaza modificaciones al presupuesto, ha abierto un debate sobre la coherencia y los contrapesos en su administración. Mientras algunos justifican sus acciones como parte de un liderazgo firme, otros consideran que su postura representa un retroceso en la rendición de cuentas y en el equilibrio de poderes en Nuevo León.