En la sesión más reciente del Congreso de Nuevo León, la ausencia de los diputados de Movimiento Ciudadano (MC) y MORENA ha vuelto a generar preocupación y críticas sobre la operatividad y compromiso de estos legisladores. A pesar de que se llevó a cabo la votación para nombrar a Joel Treviño Chavira como Oficial Mayor, una decisión que obtuvo unanimidad entre los presentes, la notable falta de los representantes de MC y MORENA en la sesión es solo el último episodio en una serie de ausencias que han marcado el desempeño del Congreso en los últimos seis meses. Este patrón de inasistencia no solo ha afectado el normal funcionamiento legislativo, sino que también ha puesto en tela de juicio la responsabilidad y seriedad con la que estos legisladores están ejerciendo su mandato.
La situación es especialmente preocupante en un contexto donde se requiere una fuerte participación política para abordar los múltiples desafíos que enfrenta el estado. Con temas cruciales en la agenda legislativa, desde la seguridad pública hasta la economía, la falta de compromiso por parte de los diputados ausentes no solo retrasa la toma de decisiones importantes, sino que también envía un mensaje negativo a los ciudadanos sobre el estado de la democracia y la gobernabilidad en Nuevo León.
Ausencias recurrentes de MC
El fenómeno de las ausencias de los diputados de MC y MORENA no es nuevo. Durante los últimos seis meses, estos partidos han acumulado un preocupante historial de inasistencias que ha dejado al Congreso en una situación difícil. Cada sesión marcada por la falta de quórum es una oportunidad perdida para debatir, legislar y avanzar en los temas que son vitales para la población de Nuevo León.
La repetición de este comportamiento ha generado críticas no solo desde otros partidos políticos, sino también desde la sociedad civil, que observa con inquietud cómo se deteriora la eficacia del Congreso. Las imágenes de un salón de sesiones prácticamente vacío, con curules sin ocupar, se han vuelto un símbolo de la apatía y la falta de responsabilidad de algunos legisladores que parecen estar más interesados en seguir agendas partidistas o personales que en cumplir con su deber de representar a sus electores.
El hecho de que estos diputados no enfrenten sanciones o consecuencias por su falta de asistencia también ha sido un punto de controversia. La impunidad con la que se manejan estas ausencias ha llevado a cuestionamientos sobre las reglas de procedimiento del Congreso y sobre la capacidad de la institución para garantizar que sus miembros cumplan con sus obligaciones. Mientras tanto, los ciudadanos se preguntan por qué sus representantes, que fueron elegidos para velar por sus intereses, están fallando en uno de los deberes más básicos de su cargo: presentarse a trabajar.
Impacto en la operatividad del Congreso
Las ausencias constantes de los diputados de MC y MORENA no solo son un problema de percepción pública, sino que tienen un impacto real en la capacidad del Congreso de Nuevo León para funcionar de manera efectiva. Sin la participación activa de todos sus miembros, el Congreso enfrenta dificultades para alcanzar el quórum necesario para llevar a cabo votaciones y tomar decisiones clave. Esto ha llevado a un estancamiento legislativo en varios frentes, retrasando la aprobación de leyes y la implementación de políticas que son cruciales para el estado.
Además, la falta de asistencia ha generado tensiones dentro del Congreso, con otros partidos y legisladores expresando su frustración por la incapacidad de avanzar en la agenda legislativa. La falta de consenso y la paralización del proceso legislativo no solo afecta a la gobernabilidad del estado, sino que también tiene repercusiones directas en la vida cotidiana de los ciudadanos, quienes dependen de un Congreso funcional para abordar y resolver los problemas que enfrentan.
La situación es particularmente grave dado el contexto actual de Nuevo León, un estado que enfrenta numerosos desafíos, desde la seguridad pública hasta la recuperación económica post-pandemia. La inacción del Congreso debido a la ausencia de algunos de sus miembros solo agrava estos problemas, dejando a la población en una situación de incertidumbre y desprotección.
Críticas y demandas de acción
Las críticas hacia los diputados de MC y MORENA por sus ausencias recurrentes no se han hecho esperar. Tanto desde el ámbito político como desde la sociedad civil, se han alzado voces que demandan mayor responsabilidad y compromiso por parte de estos legisladores. Los ciudadanos, en particular, han expresado su indignación ante lo que perciben como un incumplimiento flagrante de los deberes que deberían cumplir sus representantes.
Además de las críticas, también han surgido demandas para que se tomen medidas concretas para abordar este problema. Algunos han propuesto la implementación de sanciones más estrictas para los legisladores que no asistan a las sesiones, con el objetivo de garantizar que el Congreso pueda operar con normalidad. Otros han sugerido la necesidad de revisar los procedimientos internos del Congreso para asegurarse de que exista un mecanismo efectivo para hacer cumplir la asistencia y la participación de todos los diputados.
En cualquier caso, la situación actual ha puesto de manifiesto la necesidad de una mayor rendición de cuentas por parte de los legisladores y de una reforma del Congreso que asegure su funcionamiento efectivo. Los ciudadanos de Nuevo León tienen derecho a un Congreso que funcione en su mejor interés, y la inacción de algunos diputados no debe ser un obstáculo para el progreso del estado.