El Día de Acción de Gracias, conocido en inglés como Thanksgiving, es mucho más que una oportunidad para disfrutar de una comida en familia. Esta festividad, profundamente enraizada en la historia de Estados Unidos, tiene un trasfondo simbólico y cultural que se remonta a siglos atrás. Además de ser una ocasión para reunirse con los seres queridos, esta celebración anual evoca la gratitud por la cosecha y la supervivencia, temas que fueron fundamentales en la vida de los primeros colonos en América. A través de los años, esta tradición ha evolucionado, adaptándose a las costumbres modernas, pero manteniendo su esencia de agradecimiento y comunidad.
Origen del Día de Acción de Gracias
El origen del Día de Acción de Gracias se remonta al siglo XVII, un período crucial para los colonos ingleses que llegaron al Nuevo Mundo en busca de nuevas oportunidades. En 1621, los llamados “peregrinos” celebraron un festín para dar gracias por una cosecha exitosa, después de haber atravesado un año difícil en el que muchas vidas estuvieron en juego. Este evento histórico se llevó a cabo con la colaboración de los indígenas Wampanoag, quienes jugaron un papel esencial en la supervivencia de los colonos al enseñarles técnicas de cultivo y caza que les permitieron superar las adversidades del nuevo territorio.
Aunque el festín de 1621 no se repitió anualmente, el concepto de celebrar un día de agradecimiento por la cosecha se consolidó con el tiempo. Sin embargo, fue hasta 1863, en medio de la Guerra Civil estadounidense, que el presidente Abraham Lincoln proclamó oficialmente el Día de Acción de Gracias como un feriado nacional. En su proclamación, Lincoln instaba a los ciudadanos a dar gracias por las bendiciones recibidas, a pesar de los desafíos que enfrentaba la nación en ese momento. Desde entonces, este día se ha mantenido como una tradición anual en los Estados Unidos, celebrado el cuarto jueves de noviembre.
La Cena Tradicional de Acción de Gracias
La comida que acompaña al Día de Acción de Gracias es una de sus características más emblemáticas. El plato principal, que generalmente es pavo, es acompañado de una serie de guarniciones que varían ligeramente según las familias y las regiones. Sin embargo, los alimentos más comunes incluyen puré de papas, salsa de arándanos, relleno (preparado a base de pan, hierbas y otros ingredientes), y pastel de calabaza, que se ha convertido en un postre tradicional de esta festividad. Estos alimentos no solo son representativos de la temporada de cosecha, sino que también reflejan la conexión con los productos que los primeros colonos cosechaban en la tierra.
La comida de Acción de Gracias es un reflejo de la abundancia y la gratitud por lo que la tierra puede ofrecer, y se comparte en un ambiente de unión familiar y amistad. Aunque la comida es central en la celebración, el acto de reunirse en torno a la mesa simboliza la importancia de la familia y la comunidad, dos elementos que continúan siendo esenciales en la cultura estadounidense.
Evolución y Tradiciones Modernas
Con el paso de los siglos, el Día de Acción de Gracias ha evolucionado, adaptándose a los cambios sociales y culturales de los Estados Unidos. Si bien la esencia de la festividad ha permanecido intacta, muchas de las tradiciones que la rodean han tomado formas más modernas. Uno de los eventos más emblemáticos de esta evolución es el desfile de Acción de Gracias organizado por la tienda Macy’s en Nueva York. Desde su inicio en 1924, este desfile se ha convertido en una de las tradiciones más esperadas del Día de Acción de Gracias, con sus espectaculares globos de personajes populares, carrozas coloridas y presentaciones musicales. El desfile atrae a miles de espectadores cada año y se transmite en vivo por televisión, convirtiéndose en una parte integral de las celebraciones del día.
Por otro lado, una de las tradiciones más singulares de la celebración es el perdón simbólico del pavo por parte del presidente de Estados Unidos. En una ceremonia conocida como el “Turkey Pardon”, el presidente elige perdonar a un pavo, evitando que sea sacrificado para la cena de Acción de Gracias. Este gesto, que comenzó en la década de 1940, se ha convertido en un momento curioso y entrañable dentro de las festividades, mostrando el lado más amable y divertido de una tradición profundamente enraizada en la cultura estadounidense.
Acción de Gracias Fuera de Estados Unidos
Aunque el Día de Acción de Gracias tiene sus raíces en los Estados Unidos, la tradición ha trascendido las fronteras del país y se celebra en otras partes del mundo, aunque con diferentes matices y fechas. En Canadá, por ejemplo, el Día de Acción de Gracias se celebra el segundo lunes de octubre. La tradición canadiense tiene un origen similar al de los Estados Unidos, pues se relaciona con la gratitud por la cosecha, pero con diferencias en cuanto a las influencias culturales y los eventos históricos que dieron lugar a la festividad.
Además, en algunos países de América Latina, como Brasil, hay festividades similares, aunque no siempre están vinculadas a la misma tradición histórica. En lugares como estas naciones, el Día de Acción de Gracias puede celebrarse con influencias propias, pero con el mismo énfasis en la gratitud y la reunión familiar.
La globalización también ha permitido que muchos países, aunque no tengan una tradición oficial de Acción de Gracias, adopten algunos de los elementos de la festividad estadounidense, como la cena especial, el pavo y el tiempo de unión familiar. Esto es especialmente evidente en países con una importante influencia cultural de Estados Unidos.