El gasto en redes de Samuel García y su esposa Mariana Rodríguez volvió a encender la discusión pública. En tan solo un mes destinaron más de 4 millones de pesos en publicidad en Facebook e Instagram. Legisladores de distintos partidos exigieron al SAT y a la Auditoría Superior del Estado indagar de dónde provienen esos recursos, mientras la ciudadanía enfrenta problemas urgentes que permanecen sin solución.
Legisladores piden que se investigue
La polémica por el gasto en redes surgió luego de que se revelara que Samuel García y Mariana Rodríguez son los políticos que más dinero invierten en campañas de promoción personal dentro de la plataforma Meta. De acuerdo con reportes oficiales, el gobernador pagó alrededor de 2.1 millones de pesos y su esposa 1.9 millones durante el mes anterior.
Los números llamaron la atención en el Congreso local. Coordinadores de varias bancadas coincidieron en que esta situación debe ser revisada a fondo por la Secretaría de Hacienda y por la Auditoría Superior del Estado. La preocupación es clara: resulta insostenible que una familia gaste más de 4 millones de pesos al mes sin que se aclare si provienen de ingresos personales o de otra fuente.
Se afirmó también que es necesario que el SAT intervenga para confirmar que los recursos son legítimos y no de origen público. Según los legisladores, tener un gasto en redes tan elevado no puede pasar desapercibido cuando los ingresos del mandatario deberían estar claramente justificados.
Desde la bancada de Morena también se alzaron voces críticas. Mario Soto señaló que el gasto en publicidad personal no corresponde con las responsabilidades de un gobernador. A su juicio, la prioridad debería ser atender problemas de seguridad, movilidad y contaminación, no invertir millones en campañas de “likes”.
Un patrón de promoción constante: el estilo Mariana Rodríguez
La situación no es nueva. De acuerdo con Perla Villarreal, integrante del PRD, Samuel García ha mantenido una campaña permanente en redes sociales desde que asumió el cargo, y Mariana Rodríguez se ha consolidado como su principal aliada en esa estrategia. Para la legisladora, los recursos que se destinan cada mes a reforzar la imagen personal superan con creces lo que podría considerarse razonable.
Villarreal añadió que este esquema refleja una administración más preocupada por la visibilidad digital que por resolver las necesidades de la gente. “El Gobernador siempre tiene vigente su campaña de likes, pero no la de trabajar”, subrayó.
Por su parte, el alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza, declaró que espera que los montos erogados provengan de recursos privados. “Si el dinero es personal, el tema es distinto. Pero si se trata de fondos públicos, estaríamos frente a un problema grave”, advirtió.
Estas declaraciones evidencian que el gasto en redes se ha convertido en un foco de tensión política, ya que mientras algunos defienden que se trata de inversión privada, otros sostienen que el volumen de dinero sugiere un posible uso indebido de recursos.
Diputados piden que SAT y ASE investigue que el Gobernador y su esposa tienen ingresos mensuales que les permitan "invertir" en redes.#elnortelocal https://t.co/JviAHx9Y5P
— elnortelocal (@elnortelocal) September 4, 2025
Críticas ante la falta de prioridades
Más allá de la discusión sobre el origen del dinero, la ciudadanía ha manifestado su inconformidad por la falta de prioridades. Mientras Samuel y Mariana destinan más de un millón de pesos por semana a promocionarse en internet, Nuevo León continúa enfrentando problemas serios en movilidad, seguridad y medio ambiente.
El gasto en redes contrasta con el deterioro del transporte público, la falta de estrategias para reducir los niveles de contaminación y los altos índices de violencia que afectan a la población. Para muchos habitantes, el dinero podría utilizarse en mejorar servicios básicos en lugar de fortalecer la presencia digital de una pareja política.
Analistas consideran que este patrón responde a un objetivo electoral más que gubernamental. Con un historial de aspiraciones nacionales, Samuel García parece mantener activa su maquinaria de promoción personal con miras al futuro, mientras la gestión estatal queda relegada.
El impacto en la imagen política
Los especialistas en comunicación política advierten que un gasto en redes tan alto puede ser contraproducente. Aunque la estrategia digital ha posicionado a Samuel y Mariana en la conversación pública, también genera descontento cuando se percibe como un derroche.
Para la oposición, esta situación es la prueba de que el gobernador prioriza su carrera personal sobre los intereses colectivos. En cambio, para sus simpatizantes, representa una forma moderna de conectar con la ciudadanía. Sin embargo, la brecha entre la popularidad en línea y la realidad en las calles sigue aumentando.
El riesgo es que la insistencia en sostener campañas digitales millonarias profundice la percepción de que el gobierno estatal vive más en las redes sociales que en el territorio donde la población enfrenta problemas reales.
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